Ayer escuche en televisión y en la radio que el Gobernador del Banco de España, D. Miguel Fernández Ordóñez, urgía entre otras cosas a modificar el mercado del trabajo (para mejorar el empleo), cosa muy loable, y a los nuevos gobernantes locales y autonómicos surgidos de las urnas a ajustarse en los presupuestos con el objetivo de controlar el gasto y por ende el déficit presupuestario a nivel autonómico local, en el ámbito nacional evidentemente también.
Creo que es acertado que el Gobernador del Banco de España nos envíe mensajes o envie reprimendas cuando las cosas se hacen mal y pueden incidir negativamente en el progreso de España. Solo me asalta una duda ¿Dónde estaba el gobernador del Banco de España? Si, donde estaba cuando los bancos, que son su principal campo de vigilancia, hacían y deshacían, en los temas hipotecarios que han llevado a esta crisis, porque digan lo que quieran a la banca española, en general, el Estado ha tenido que inyectarla dinero y mucho, mucho dinero para que se saneen y se ponga muy guapa, y eso si siga dando jugosas recompensas a los directivos que no supieron o no quisieron ver el problema que estaban creando… porque lo crearon ellos, no nosotros. En este campo, el Sr. Gobernador es harto prudente, pues D. Miguel cuide su rebaño, que tiene las ovejas desmandas en sus comportamientos, y esos comportamientos los pagamos… los de siempre.
Habría que preguntarle al Sr. Gobernador con respecto a los comportamientos de la banca ¿Y ahora que hacemos…?
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